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| Por Darío H. Schueri, desde Santa Fe. |
Todo esto ocurre dentro de un marco de incertidumbre social sobre el futuro de la economía, cuya recuperación ahora el Presidente Mauricio Macri trasladó para fines de año. Durante el mítico “segundo semestre”, los esfuerzos gubernamentales estarán puestos en domar la inflación. En el corcoveo vienen ganando los precios.
Las encuestas le otorgan al Presidente una caída en la imagen; pero creemos que resulta inútil salir a indagar hoy día sobre el volátil humor social que está encendido; mañana – como construcción literaria del futuro - puede que haya variado 180 grados.
Hoy lo resguarda al Presidente del incendio, el prolijamente difundido latrocinio ocurrido en la “era K”. Pero todo en la vida tiene un límite. ¿Llegará antes la recuperación económica, que el aburrimiento social por la corruptela kirchnerista?.
La reforma constitucional dejó en “off side” al Intendente Corral
El azaroso marco económico nacional obliga al Presidente Macri a cohesionar fuerzas con los socios radicales, para evitar que la por ahora dispersa oposición cobre vitalidad, se agrupe y vaya por sus ropas.
En los distritos nacionales que administra Cambiemos el discurso es inamovible; el problema se presenta en la poderosa Provincia de Santa Fe donde gobierna la “tercera vía”: el FPCyS, integrado desde hace dos décadas por los mismos – o al menos algunos – radicales que hoy comparten el trono nacional.
Santa Fe ostenta a través del Intendente capitalino José Corral la presidencia del Comité Nacional del radicalismo. Corral debe hacer malabares y contorsiones en la altura y sin red para no caer en la cada vez más visible contradicción de – como le espeta el PRO local – cobrar en las dos ventanillas: el FPCyS y Cambiemos. ¿Hasta cuándo?.
Desde las páginas dominicales del influyente Diario Clarín, el macrismo le hizo notar al lord mayor santafesino que tiene que ir endureciendo las posiciones contra el socialismo santafesino, si no quiere ver amenazada su continuidad al frente del radicalismo nacional. No son épocas para dobles status.
Fue así como el líder radical salió a oponerse a la reforma de la Constitución provincial impulsada de manera decidida por el Gobernador Lifschitz. "No es el momento adecuado para reformar la Constitución, la gente está preocupada por la economía", amonestó.
Pero no pensó que dentro de su propio Partido saldrían a enmendarle la plana. El primero fue el líder del MAR Julián Galdeano, quien le pidió que “no especule, a la vez que le advirtió que respaldarán el proceso para que se haga “cuanto antes”. Coincidió con Galdeano el titular del Concejo Municipal de Santa Fe Leonardo Simoniello, a quien Corral no tiene entre sus planes sucederlo en caso de que pelee la Gobernación en el 2019.
Luego fue el turno del Senador por San Justo y actual Presidente de la Convención de la Unión Cívica Radical Rodrigo Borla, quien inclusive fue mucho más allá y habló de la fruta prohibida: la reelección del Gobernador.
El Diputado radical NEO y ex Vicegobernador Jorge Henn también adhiere a la reforma, y lo hizo saber luego de salir del despacho del Ministro Farías.
Y seguramente en lo que resta de la semana, habrá muchas más firmas radicales apoyando la vocación reeleccionista de Miguel Lifschitz
Lifschitz no se deja amedrentar e insiste
Precisamente en la reunión de gabinete de este lunes, el Gobernador le pidió al Ministro de Gobierno Pablo Farías que junto al Dr. Oscar Blando, director provincial de Reforma Política y Constitucional salgan a explicar los aspectos medulares de la reforma constitucional.
El Gobernador tiene que vencer la resistencia, no sólo de un sector del radicalismo (el que responde a Corral), sino a miembros de su propio Partido que creen que el momento propicio para encarar la reforma sería recién el 2018.
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