"El Ministerio de Educación no dispuso el cierre de ningún establecimiento, no existe ninguna disposición que así lo indique" -reiteró el funcionario-, "solo se intervino en favor de los niños que, de acuerdo con la Ley Nacional de Educación, deben asistir a la escuela más cercana a sus hogares, y esa escuela es la primaria que está en la misma localidad donde viven, donde no deben viajar para asistir a clases, y donde pueden integrarse con los demás niños de su edad".
En tanto, las tareas de la maestra de la escuela rural donde asistían los tres niños consisten en facilitar la integración de los niños primaria Manuel Belgrano, donde acaban de incorporarse, "con el consentimiento de sus respectivas familias", como consta en las actas que registran todo el proceso.
"El gobierno de la provincia valora y fortalece la educación rural, que es clave para garantizar el acceso a la educación a las poblaciones radicadas fuera de los cascos urbanos, evitando el desarraigo y promoviendo la continuidad de las tradiciones familiares", destacó Paggi. "Pero esta situación es una muy diferente -aclaró-: se trata de niños que viven en la zona urbana y a los que se estaba trasladando para asistir a clases.
"Esto, sin contar los días que perdieron de clases por encontrarse inaccesibles los caminos durante el temporal del mes pasado que afectó el acceso a la escuela de tantos niños y niñas de las zonas rurales de nuestra región", agregó.
Finalmente, el funcionario consideró: "La supervisora actuó como corresponde, priorizando los derechos de los niños. Luego, el traslado de la maestra y el cierre del establecimiento sugeridos por ella son medidas que le corresponde tomar a la ministra, quien ya ha negado que ese sea el camino a seguir".
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