El gobierno suma convicciones y resta resultados

Por Salvador Di Stefano.  
El gobierno ha llevado adelante políticas, y reafirmado convicciones, que redoblan muestran sospechas de un cambio profundo en la economía, que no sabemos si será sustentable en el tiempo.

- El gobierno se empecina con dejar fijo el tipo de cambio, esto no alienta a que ingresen reservas, se traban las importaciones, y perdemos exportaciones por ser caros a nivel internacional.

- El gasto público crece a un ritmo del 49% anual. Esto muestra a las claras que el Ministro de Economía está convencido que el gasto público es inversión, y que la emisión para financiar el gasto no es inflacionaria. Desde nuestro punto de vista, decimos ver para creer, mientras la inflación siga elevada, esta afirmación no luce correcta.

- Las reservas siguen a la baja, el Banco Central pierde el nivel de U$S 27.000 millones, no hay ingreso de divisa a la vista. Los dólares del gobierno chino, ruso, y el aporte para el 4G no aparecen en la plaza financiera.

- El gobierno sigue optando por emitir bonos en el mercado interno, en este caso el Bonad 2016. Un bono a 2 años de plazo, emitido en pesos que ajustan por el dólar oficial, y paga una tasa del 1,75% anual. La amortización opera en 2 años, y el pago de la renta será semestral. Se consiguieron U$S 983 millones, que se integrarán en pesos, lo que equivale a $ 8.345 millones.

- En el mercado de futuro de dólar Rofex, el interés abierto asciende a U$S 4.700 millones, algo menos que un mes atrás, con cotizaciones en baja para el dólar futuro. El mercado (con la ayuda del Banco Central y el Banco Nación vendiendo) le cree al gobierno, y piensa que la devaluación del dólar oficial no está en el horizonte inmediato.

- Los depósitos a plazo fijo siguen estancados, sin mostrar una variación significativa. Los bancos están bajo regulación estatal, la tasa de interés corporativa a empresas creció, y esto es un problema para muchas compañías.

- Las acciones y bonos no paran de caer, ante la policía cambiaria que se instrumentó en el mercado. El mercado argentino ha iniciado una gran corrección, y lejos está el gobierno de poder culpar a Estados Unidos de una crisis internacional, ya que muestra sus principales indicadores bursátiles en niveles récord.

- El precio del petróleo se derrumbó a niveles de U$S 80 dólares el barril. Nuestro socio querido, Venezuela, ha ingresado en una dura crisis, la caída del precio de su principal producto de exportación, podría comprometer los pagos de deuda y se aproxima a la cesación de pagos. Nuestro nuevo gran amigo, Rusia, está complicado por la misma razón. En el mejor momento de Estados Unidos, nos enemistamos, y nos hacemos amigos de los más perdedores del planeta.

- La baja del precio del petróleo es un desahogo de corto plazo, ya que compraremos energía más económica. De largo plazo, es un gran problema. Nuestros pozos no convencionales tiene un costo elevado de extracción, se consigue combustible a un precio equivalente de petróleo en U$S 84 el barril. La baja del petróleo relegará inversiones en Vaca Muerta.

- La elección de Brasil es determinante y binaria. Si gana Dilma Rouseff estamos seguros que Brasil seguirá en el Mercosur, y nos acompañará en la cruzada de una economía cerrada. Las consecuencias pueden ser una brusca caída de la bolsa paulista y una devaluación del real. Si gana Aecio Neves, Brasil podría recibir una avalancha de dólares que aprecie al real, pero Brasil comenzaría a firmar acuerdos de comercio con otros países, y esto debilitaría al Mercosur.

Conclusión

Del conjunto de noticias, podemos desprender que la coyuntura de nuestro país tomará un rumbo muy firme en la última parte del año, ya sea por la solución de nuestros problemas, o bien la profundización de un escenario adverso.

En la medida que no veamos una suba de reservas, más crédito al sector privado, una recomposición de salarios y mayores ventas en el mercado, estaremos lejos de una mejora en la actividad. Salvo los casos puntuales, como la ciudad de Las Parejas que sigue creciendo gracias a una industria vinculada a sectores ganadores como el petróleo, minería y maquinaria agrícola destinada a exportación. Muy cerquita de Las Parejas, Carcarañá, de similares características demográficas, pero distinto perfil productivo y empresarial, atraviesa una dura recesión. Los frigoríficos están lejos de atravesar un buen momento, a pesar de la suba en el precio de la hacienda en pie. Nada es absoluto, todo es relativo.

El gobierno está empecinado en seguir aplicando recetas que no han dado resultado, solo el transcurrir del tiempo dará el veredicto final. Desde nuestro punto de vista, lejos estamos de ser optimistas, sin embargo, hay que tratar de sacarle diferencias positivas al contexto inflacionario que vivimos.

Bonus track

El Ministro de Economía le dio un mensaje al sector agropecuario para que venda la soja, y el país tenga más reservas. Le aclaramos al Ministro, que de las 20 millones de toneladas que le restan vender al sector agropecuario, una buena parte fue entregada a exportadores, que seguramente ya han vendido dicha mercadería, solo resta que el exportador la pague, cuando el hombre de campo lo solicite. Eso no quiere decir que las exportaciones no se hayan realizado. Por otro lado, 20 millones de toneladas a un precio de la soja de U$S 360 la tonelada, nos da un total de U$S 7.200 millones, y no los U$S 10.000 millones que se pregonan. Justo cuando el Ministro vaticinó la baja, la soja no para de subir, gracias Axel.

Salvador Di Stefano. Asesor en Negocios, Económico y Financiero tanto de empresas de la ciudad y la región; como de individuos y empresas familiares ligadas al comercio, industria y campo. Publicado en www.salvadordistefano.com.ar

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